martes, 25 de enero de 2011

Optimismo antropológico

Los que defienden eso de que el hombre es un lobo para el hombre pecan de optimismo. Los lobos son señoriales, inspiran respeto. Si algún animal es adecuado para la gran mayoría de seres humanos son los carroñeros: hienas, buitres. Esperan a que hayas caído para abalanzarse sobre ti. Como mucho esperarán a las sobras del banquete de los lobos (alguno hay). Son cobardes, acechan, sólo se atacan entre ellos, y huyen despavoridos ante la mínima muestra de vigor. Las ratas tampoco son mala imagen: sucias, huidizas, astutas, también cobardes, portadoras de enfermedades, ubicuas...

Sí, el homo homini lupus es una muestra de optimismo superlativo.

4 comentarios:

PENSADORA dijo...

¡¡¡¡JAJAJAJA!!! ¿estamos picaditos? ¿ein?.

No le quito razón no.

Ultimamente pienso mucho en cómo hemos podido llegar hasta la cumbre de la cadena trófica con lo poco evolucionados que estamos. Excepto por nuestra capacidad para desarrollar armas...

UUUUfffff! que empiezo a desbarrarrrrr!

El Pez Martillo dijo...

Picado no, cabreado con el mundo.

Hemos llegado ahí arriba precisamente por nuestra infinita capacidad para ser cabrones. Y no hace falta tener armas para ser unos hijos de puta.

Saludos.

PENSADORA dijo...

Me empiezas a dar miedo Pez... ¿recuerdas la película "un día de furia"?... ¡pues eso! jajajajaja!

El Pez Martillo dijo...

Que nadie se cruce conmigo que le muerdo!!