La pornostar cultureta: Sasha Grey

El tópico en torno a las actrices porno nos lleva a pensar en rubias neumáticas (excesivamente neumáticas) e inanes. Muy guarras, sí, pero con las que uno no se plantearía otra cosa que retozar preso de la lujuria. Sin embargo, hay algunas que escapan al cliché, como es el caso de Sasha Grey, una joven de 23 años que ha introducido un nuevo estilo en el mainstream del porno: la cultureta cañera.

Esta moza, que físicamente no destaca demasiado (es bastante delgada y no atesora los atributos de la mayoría de sus colegas), que podría ser compañera de trabajo o vecinita de cualquiera, se ha ganado un lugar especial en la industria pornográfica por méritos propios. En la primera escena que rodó a nivel profesional, con el mismísimo Rocco Sifredi, logró dejarlo fuera de juego al pedirle que la golpeara en el estómago, algo que él no se atrevió a realizar. Y es que a esta señorita le va la marcha. Dice que está en el porno porque le gusta el sexo y que es para ella un mero ganapán. Sus intereses van mucho más allá de acrecentar su carrera (aunque poco más lejos puede llegar ya): es una ávida lectora de gente como Camus, Sartre, Nietzsche, Baudrillard, Brecht, le gusta el cine de Godard y Antonioni, y en lo musical, entre muchos otros, destacan gustos como Joy Division, Bauhaus, Depeche Mode... Es tanta su afición a la música, que tiene un grupo de música industrial denominado Atelecine (escuchen, si se atreven, el tema "I came I sat I departed"). 

En resumen, interesante moza, alguien que parece disfrutar de su cuerpo y que además gusta de cultivar su mente. Una combinación muy estimulante. Aunque me temo que muy pocos podrían aguantarle un asalto (tanto mental como corporal).