domingo, 16 de julio de 2006

Derecho de admisión


Hay cosas que no entiendo. Debe ser por mis cada vez más escasa neuronas, y porque las tengo siempre ocupadas en lo que no debiera. ¿Porqué a mi no me dejan entrar en según que locales si llevo sandalias y a las chicas las dejan pasar semidesnudas?¿Es por evitarles dolorosos pisotones a mis delicados pies?. Algunos me dicen que dejando entrar a las chicas se facilita que vayan más tíos. Deben estar encantadas de que se las use como reclamo. Seguro que luego van de supermujeres emancipadas y todo eso, indignándose cuando cualquiera las use como objetos (menos en estos casos, por supuesto).

Esto de mirar estas estupideces a la hora de dejar entrar a la gente a los locales tiene algo de siniestro. Cuando se habla de reservarse el derecho de admisión, yo entiendo más bien que se trata de cuidar quién entra para que no haya follón (vamos, que yo no dejaría entrar a alguien con una pistola, o con signos de ir drogado y estar agresivo), ahí lo entendería. Pero lo de basarse en la ropa me parece tremendo. La gente lo tiene muya asumido y lo ve como normal, pero se empieza por lo de las sandalias, y se está a un paso de que no te dejen entrar si tienes pecas, eres cojo..., o si eres judío (esto último me suena de algo, creo que alguien ya lo ha hecho antes, no estoy seguro). Y para colmo nos lo cuelan con buenas formas: "gracias por cuidar tu imagen". Eso es una soberana estupidez. Hasta el que va desaliñado cuida su aspecto, sólo los mendigos no lo cuidan (y todavía podríamos discutirlo).

Y para terminar, les dedico esta canción a todos esos que se creen que lo del derecho de admisión les da carta blanca para lo que quieran:

1 comentario:

Cvalda dijo...

Un detalle curioso: creo que fue en una clase de Derecho donde escuché que, en realidad, el dueño de un local no puede decir "no quiero que entre la gente vestida de tal forma" o "gente de color", etc...Sino que debe ser algo como "recomiendo la entrada al local con camisa y zapatos" o algo así...Bueno, para el caso es lo mismo; es una injusticia; y lo digo como chica, que nunca ha sido reclamo de nada, y que tampoco quiere serlo, jeje.

A mi no me dejan entrar en muchos bares porque siempre voy en deportivas...o eso dicen, claro.