Anoche, una vez más traicioné todos mis planes de trabajo. Pillé recién comenzada El hundimiento en la televisión, y aunque ya la había visto, no pude resistirme a visionarla de nuevo.
Siempre me ha interesado la época nazi (y la soviética, pero de esta tenemos menos detalles, debido al secretismo comunista y a que perduró por más tiempo y además, al haber ganado la guerra, ha sido escrutado de otro modo), quien siga el blog lo sabrá porque he dedicado varias entradas a esos infaustos años. Fueron doce años de historia intensa y repleta del más extremo delirio. En buena lógica, visto desde la distancia, tenía que acabar como acabó: guerra, muerte, sacrificio y locura asesina.
La película, para quien no la haya visto, muestra los últimos días del régimen nazi, con un Berlín asediado y destruido por los rusos, Hitler y los suyos metidos en el búnker y en su propio delirio (con los rusos a las puertas del búnker y el ejército alemán en desbandada, Hitler aún creía en la posibilidad de una maniobra sorpresa que pudiera hacerles ganar la guerra), las deserciones y abandonos en cascada, y la tragedia. Porque si algo destaca en la película es el creciente ambiente opresivo que poco a poco se va apoderando del búnker, cada vez más vacío y ocupado tan sólo por los más incondicionales y fanáticos líderes del régimen. También destaca la interpretación de Bruno Ganz, impresionante y estremecedor en el papel de Hitler:
De todo el film, lo que, al menos en el visionado de ayer, más me conmovió fueron los sacrificios de los que no pudieron elegir. La primera muerte en este sentido es la de Blondi, la amada perra de Hitler, a quien éste envenena antes de su propio suicidio y el de Eva Braun. Y también, claro está, la escalofriante escena en la que Magda Goebbels mata a sus seis hijos (no quería que vivieran en un mundo sin nacionalsocialismo),que creo que vi sin respirar y con el corazón encogido.
En ncualquier caso, peliculón que no me importará volver a ver y que recomiendo a todo el mundo, aunque no sea en 3D (algo sobre lo que tendría que hablar largo y tendido).
Siempre me ha interesado la época nazi (y la soviética, pero de esta tenemos menos detalles, debido al secretismo comunista y a que perduró por más tiempo y además, al haber ganado la guerra, ha sido escrutado de otro modo), quien siga el blog lo sabrá porque he dedicado varias entradas a esos infaustos años. Fueron doce años de historia intensa y repleta del más extremo delirio. En buena lógica, visto desde la distancia, tenía que acabar como acabó: guerra, muerte, sacrificio y locura asesina.
La película, para quien no la haya visto, muestra los últimos días del régimen nazi, con un Berlín asediado y destruido por los rusos, Hitler y los suyos metidos en el búnker y en su propio delirio (con los rusos a las puertas del búnker y el ejército alemán en desbandada, Hitler aún creía en la posibilidad de una maniobra sorpresa que pudiera hacerles ganar la guerra), las deserciones y abandonos en cascada, y la tragedia. Porque si algo destaca en la película es el creciente ambiente opresivo que poco a poco se va apoderando del búnker, cada vez más vacío y ocupado tan sólo por los más incondicionales y fanáticos líderes del régimen. También destaca la interpretación de Bruno Ganz, impresionante y estremecedor en el papel de Hitler:
De todo el film, lo que, al menos en el visionado de ayer, más me conmovió fueron los sacrificios de los que no pudieron elegir. La primera muerte en este sentido es la de Blondi, la amada perra de Hitler, a quien éste envenena antes de su propio suicidio y el de Eva Braun. Y también, claro está, la escalofriante escena en la que Magda Goebbels mata a sus seis hijos (no quería que vivieran en un mundo sin nacionalsocialismo),que creo que vi sin respirar y con el corazón encogido.
En ncualquier caso, peliculón que no me importará volver a ver y que recomiendo a todo el mundo, aunque no sea en 3D (algo sobre lo que tendría que hablar largo y tendido).
2 comentarios:
Coincido en usted en que es una gran película, aunque amigo Pez, no cree que le ha chafado un poco la emoción a quienes no la hayan visto?
Por cierto yo vi otra también muy buena y ambientada en la misma época 'Napola'. Si no la ha visto se la recomiendo.
Saludos!
Me apunto la recomendación, intentaré sacar tiempo para verla.
Por otro lado, si he contado cosas del final es porque la película es casi un documental, no cuenta nada que se suponga que no debamos saber de antemano. ¿Es que la gente no sabe que Hitler se suicidó en el búnker? (al menos es la versión oficial, que hay quien asegura que logró escapar...). Es como ver "La pasión de Cristo", sabes que al final lo crucifican, y la peli no pierde su gracia.
Salud!
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