lunes, 2 de abril de 2007

Las tres M de la enfermería III: Médicos


Otra de las lacras que han marcado el desarrollo de la enfermería es la de la ligazón con la medicina. Ciertamente, el papel del médico es fundamental en el mundo sanitario, pero durante siglos, todo ha girado en torno a la medicina, convirtiéndose en el centro absoluto. La gente ponía (y pone) sus vidas en sus manos, y siempre han sido vistos con cierta veneración, llegando incluso a adquirir bastante poder dentro de las comunidades en las que desarrollaban su trabajo. Esto, unido a la asociación ya comentada entre los cuidados y lo femenino, hicieron que las enfermeras quedaran relegadas al papel de meras secretarias o ayudantes del médico. En resumen, que realizaban el trabajo sucio que el señor doctor no podía desempeñar, debido a su categoría. El mundo sanitario se convirtió en toda una serie de doctores que ordenaban y todos los demás, que obedecían.

Todos hemos llamado enfermera a la secretaría que te recibe en la conbsulta del médico, y que lleva las fichas y organiza la consulta, prepara material y te da cita. Y la verdad es que para eso no hace falta estudiar. Y todos tenemos aún el vicio de llamar a las enfermeras ATS (Ayudante Técnico Sanitario, cuando hace ya 30 años que esa titulación desapareció). Incluso todavía se mantienen algunas servidumbres, como la de tener que preparar todas las mañanas el café a los médicos (algún día tengo que hablar sobre el café y la enfermería). La orientación era hacia los médicos y no hacia los enfermos, que son los que deberían ser objeto de nuestros cuidados y atenciones. Incluso se llegaba al extremo nada infrecuente de jovencitas que se metían a enfermeras, a menudo espoleadas por sus madres, por aquello de "pilla a un buen médico, que te resuelva la vida", y no son pocas las parejas de médico-enfermera en este ambiente. Y también, a modo de anécdota, en algunas de las series de médicos que inundan la programación televisiva, se ven pocas enfermeras trabajando, por no decir ninguna.

Poco a poco, algunas cosas han ido cambiando, y de cada vez más todos tenemos claras nuestras funciones, y la concepción del trabajo en equipo se va imponiendo. Ya no se trata de órdenes que da el médico, sino de prescripciones que otros cumplimos. Incluso ellos tienen más o menos claro cuál es nuestro papel y tienen en cuenta nuestras opiniones. La cuestión es compleja y no está aún acabada, pero se está en el camino.

De todos modos, aún queda un cierto síndrome de Estocolmo respecto a los médicos, y muy a menudo el mundo de la medicina es el espejo en el que nos miramos los profesionales de la enfermería. Muchos son lo síntomas. Para empezar, la carrera está llena de "médicos frustrados", gentes que, por no haber sacado las notas suficientes o por no tener los recursos necesarios, se han tenido que conformar con una carrera que no es medicina, pero es sanitaria (y que para muchos, una enfermera es "medio médico", como alguna vez me ha dicho algún paciente). Y También está la cuestión de las enfermeras "minimédico", que pretenden saber mucho de fisiopatología, tanto que incluso se meten en cuestiones médicas y pretenden dar lecciones a los MIR. Es evidente que la experiencia y el contacto con lo médico hacen que sepas mucho, e incluso es necesario (muy a menudo los que identificamos nuevos síntomas y complicaciones somos nosotros), pero nunca hay que perder de vista que lo nuestro es el cuidado. Y ojo, que también nestán las auxiliares de enfermería, englobadas dentro del personal de enfermería, pero que también hacen su papel importante en todo esto.

Que quede claro, el médico diagnostica y prescribe. El personal de enfermería cuida. Y entre todos curan al enfermo.

7 comentarios:

Jarttita. dijo...

Y tú, cuándo decidiste ser enfermero?.

El Pez Martillo dijo...

Buena pregunta. Soy uno de esos médicos frustrados de los que hablo. Desde que tengo memoria siempre he tenido una vocación sanitaria, pero no por ayudar a los demás y todas esas mandangas, sino porque me apasiona la anatomía y la fisiología. Me encanta conocer cómo funciona nuestro cuerpo. Y como
lo más evidente para eso es la medicina, pues siempre quise ser médico. Pero claro, aquí en la isla no se puede estudiar, y salir fuera cuesta una pasta, así que tuve que conformarme con la enfermería (o eso pensé yo). De todos modos, ahora que conozco un poco el tinglado sanitario, me alegro de no haber estudiado medicina, así mantengo más contacto con los pacientes (lo de poder pinchar y cortar es impagable).

Salud.

Jarttita. dijo...

Dorian!!!..

Te está gustando?. El tío en el concierto contó una historia chula sobre que en Madrid se encontró a una mendiga leyendo un libro de Cortázar, una chica Argentina...y le hizo una canción. Muy de espectáculo, supongo, pero estuvo chulo...a mí me gusta mucho " todo el mundo quiere ser una estrella" y " A cualquier otra parte", claro.:).
Muaks.

( Sobre lo de ser médico...tengo una historia que contarte, pero lo haré en mail, que es privada: cómo se está comportando la médico de la madre de mi mejor amiga..).

Anónimo dijo...

hola, me gusto tu discurso, muy bien estructurado y algo profundo, lamentable que seas un medico frustrado, debiste perseverar mas para ser lo que realmente querias... pero en fin.. lo unico que queria decir es k estas mal con respecto a lo de los enfermeros minimedico... yo al contrario tuyo, considero que es mejor saber mas de lo justo y necesario, no tratar de dx a tus pacientes, pero si entender lo que les pasa, no solo dedicarte a curar... puede que en algun momento estes en desacuerdo con el medico y si tienes los fundamentos correctos vale la pena hacerselos saber al doc.. esto no kiere decir que te creas medico o algo parecido, sino que demuestra que eres algo mas que el subordinado del medico, eres un profesional pensante que hace su trabajo porque sabe, no porque le dijeron que lo hiciera..
y eso...

rupholino dijo...

hola pez martillo, y hola loda, estoy de acuerdo con el comentario de loda y en parte contigo mi querido pez. no por saber un poco mas vamos a ser pseudomedicos, nosotros los enfermeros tenemos una doble carga en que sentido digo, en el sentido del conocimiento, porque, aparte de impartir los cuidados y cumplir las indicaciones, debemos agregarle el plus del fundamento de lo que estamos realizando. entendemos que enfemrería es cuidado del paciente, pero el cuidado fundamentado en principios científicos. al medico se le paga por saber y al enfermero o la enfemera por cuidar y encima debemos saber las bases de los cuidados que impartimos. o sino seriamos simples obreros. es porque no sabemos o lo hacemos sin saber es que nos tienen es esa perspectiva desalentadora todo el mundo, como sombra de la medicina. recien sabiendo enfaticamente los procedimientos los demas profesionales de la salud valoran nuestro trabajo el saber porque hacemos lo que hacemos. tengo tantas ideas que compartir pero solo para respponder esta nota me detengo hasta aqui. gracias, es la primera vez que hago un comentario al respecto de mi profesion. desde paraguay un abrazo

rupholino dijo...

desde ya gracias, avisenme cualquier cosa con respecto a esta interesante faceta de la personalidad de nuestra tan maltratada pero abnegada profesion

El Pez Martillo dijo...

Tenéis razón en lo que decís, y claro que hemos de saber los fundamentos de lo que hacemos. Nuestra labor también es de apoyo al médico. Pero el matiz está en esas enfermeras que parecen saber más que los médicos, que están continuamente cuestionando su labor sólo porque creen saber más (en mi entorno hay bastantes de estas, y seguro que en el vuestro también) y les minusvaloran. No sé si me explico.

Gracias por los comentarios, son siemprre bien recibidos. Saludos.