sábado, 2 de junio de 2007
Malpensado
Dice un antiguo refrán que "piensa mal y acertarás". Esto nos pone sobre la pista de uno de los comportamientos más extendidos de la conducta humana: la mentira. El refran nos recuerda que nuestro interlocutor puede no estar diciéndonos la verdad, de que tal vez oculte algo o lo disfrace según su conveniencia. No hace falta acudir a aforismos de la sabiduría popular para darnos cuenta de ello. Todos lo hacemos, y por eso podemos tener la certeza de que los demás no son muy distintos a nosotros. Si lo tomamos al pie de la letra, la sociedad se iría al traste, puesto que se generaría una destructora oleada paranoide. Paralelamente a la compulsión mentirosa del ser humano, hay otra crédula que la compensa. Al igual que nos engañamos, tendemos a creérnoslo todo. Así queda todo más o menos equilibrado y es preciso recordarnos los unos a los otros que a lo mejor se nos está engañando.
Pero no quería hoy hablar sobre esa forma de pensar mal, sino en otra más entretenida, práctica y divertida. Me refiero a esa forma de estirar las palabras, de sacar cosas de contexto, de conectarlas de formas creativas y extrañas. Es la típica situación en la que se ven significados que los otros no ven, normalmente significados chistosos o que dan pie a unas risas. Es cuando te dicen "eres un malpensado". El tema del sexo es un recurso evidente y un recurso fácil, y es lo que más se utiliza para estos menesteres del malpensar. Más allá de los momentos divertidos que se puedan provocar, el malpensamiento puede ser un muy buen ejercicio, puesto que ayuda a establecer conexiones entre los significados, a mantener una cierta agilidad mental y a facilitar de algún modo la sociabilidad (pero sin pasarse, ya que la línea que separa el divertido del graciosillo es muy delgada). Pensándolo bien, y hablando de conectar significados, se puede llegar a decir que el malpensar es un forma de poesía, de creación, puesto que el término poesía deriva del griego poiesis (y no me sean malpensados), creación.
Lo dicho: piensa mal, aunque no aciertes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
¿Conoces el blog de Jotacé, amigo Pez?
La cuestión es pensar:P.
No conozco el blog ese, Mon Petit Renard. ¿De qué va? ¿Tiene algo que ver con el asunto?.
Eso es, Jartitta, que luego se nos resecan las neuronas.
Sí, claro.
http://jotacedt.blogspot.com
El arte de la descontextualización.
Me sumo a la recomendación alalcomeneica. saludos
Publicar un comentario