sábado, 29 de agosto de 2015

Infidelidades

Resulta que hay una página web que facilita las infidelidades de pareja. De la cual unos hackers han pirateado sus bases de datos. De entre la información entresacada y que se ha publicado, destaca el hecho de que la grandísima mayoría de sus clientes son hombres, y que de las mujeres, un porcentaje nada desdeñable son en realidad hombres con un perfil falso. En seguida han salido las hermanitas de la corrección a subrayarlo, dando a entender que los hombres somos de naturaleza infiel y que ellas, pobres, son sólo unas amantísimas y abnegadas esposas que tienen que aguantar cornamentas varias. Como si las listas de usuarios de una web fuera una radiografía de la infidelidad en el mundo. 

Pero yo lo interpreto de otro modo mucho más simple: ellas no necesitan acudir, y no acuden, a webs para ser infieles. Tiene otro "estilo". Y es que no hay mejor modo de poder ser infiel que haciendo creer a todo el mundo que eres de una pureza prístina e inmaculada, que en cuestiones amorosas entregas todo tu ser. Y si además te escandalizas con los cuernos ajenos, el disfraz ya es muy verosímil. 

lunes, 24 de agosto de 2015

Exorcizar al exorcista

Es un vicio muy habitual entre los exorcistas que, de tanto luchar con los demonios, se creen inmunes a él. Nada más lejos de la realidad, pues a menudo el diablo habita en ellos, aunque se tengan por limpios. Y es que, antes, durante y después de los exorcismo, hay que estar exorcizándose a uno mismo y no bajar la guardia. 

domingo, 23 de agosto de 2015

viernes, 21 de agosto de 2015

Bobbies en Magaluf

Hace unos días hemos tenido por a dos bobbies ingleses patrullando por las calles de Magaluf. Dicen que es una experiencia piloto para que los turistas (mayoritariamente británicos en esa localidad) se sientan más a gusto, por aquello de ver lo acostumbrado. El asunto ha salido en todos los medios, incluso los de ámbito nacional, y nos lo venden como una colaboración muy fructífera y una excelente labor (además del sospechoso hecho de que hayan actuado en situaciones de "violencia de género"). Más allá de la cuestión de la colaboración entre policías y estados, que me parece estupenda, me parece que es algo que no deja muy bien a nuestros cuerpos policiales. Porque que hayan ido a patrullar precisamente en los lugares más conflictivos (Magaluf y Sant Antoni de Portmany en Ibiza) pone sobre la mesa la incapacidad de nuestros policías para controlar esas zonas. Y claro, hay que llamar al séptimo de caballería y al primo de zumosol para poner un poco de orden, al que parece que tienen más respeto (cosas de la "cercania", supongo). Y nosotros encima bailándoles el agua. 

jueves, 20 de agosto de 2015

Epifanías musicales

De forma súbita una canción que conoces, que has escuchado mil y una veces pero que nunca ha acabado de llegarte (simplemente la pones porque forma parte de un disco en el que hay otras que te gustan más), se presenta ante ti con un brillo distinto y te deslumbra. Como si nunca le hubieras prestado la suficiente atención y un buen día la pones con otros oídos, más predispuesto hacia ella. ¿A qué se deben estas epifanías musicales? ¿Será puro azar? ¿O tendrá más que ver con la presión atmosférica, o alguna sutil combinación hormonal y de neurotransmisores, los cuales trabajan ese día para que te toque fibras que otras veces permanecían intactas?¿Es, en resumidas cuentas, una cuestión de disposición propia? Parece evidente, pero no lo es menos que ha de haber una base en la música, una apertura que requiere una disposición. 

martes, 18 de agosto de 2015

Ovejas y pastores

Por todas partes se oye al rebaño. Argumentos repetidos por doquier, los mismos enfoques, las mismas respuestas. Y si hay alguien original, lo es para ser pastor, para que los espíritus ovejunos expandan sus novedades y le creen un rebaño sobre el que creerse dueños. 

En parte está bien, porque así es fácil detectarlos: se les pone un señuelo, y si saltan cual mecanismo automático con una respuesta estereotipada, ahí hay una oveja. Con los que quieren ser pastores también resulta fácil: tan sólo hay que fingir sumisión, lamerles un poco el culo, y si les gusta la situación y no huyen o te hacen huir a ti, he ahí alguien con voluntad de pastor.

viernes, 7 de agosto de 2015

El nuevo maniqueísmo

Tenemos establecido un nuevo maniqueísmo, no ya centrado en lo moral, sino en lo económico. Todo lo que produce beneficios es el bien, y lo que produce pérdidas es el mal. Y todo lo que no es bien, es mal, y viceversa. Pero en realidad, bien pensado, no siempre aquello de lo que no obtenemos un beneficio es una pérdida (tan sólo lo es en el ámbito imaginario, al no cumplirse aquello que podríamos hacer), sino que simplemente es algo de lo que no nos beneficiamos. Obsérvese la perversión del asunto: al no ganar nada, automáticamente lo contamos como una pérdida, cuando es algo neutral, que no es ni ganancia ni pérdida (tiene algo de ambas). Y claro, lo ambiguo no nos gusta...

martes, 4 de agosto de 2015

Gym hits

A veces pienso que los éxitos se diseñan no para sonar en las radios, como antaño, sino en los gimnasios

lunes, 3 de agosto de 2015

Estuporosos

El otro día un hombre mató a su ex en una pequeña localidad mallorquina. De nuevo la ceremonia de siempre: golpes en el pecho y minutos de silencio. Otra vez la hoguera de las vanidades de autoridades y asociaciones varias que han de mostrar lo concienciados que están y lo mucho que les duele el problema. 

Pero tranquilos que no quiero endosar una reflexión sesuda sobre el asunto. Tan sólo destacar dos reacciones al respecto que he visto en las medios, las cuales inciden en otra dirección. Por un lado, está la de un vecino del pueblo en el que han ocurrido los hechos, que mostraba su incredulidad con lo sucedido porque, "aquí no hay gente violenta". Es muy típico entre los mallorquines de pura cepa (en realidad es humano, demasiado humano, pero en Mallorca se da de forma muy acusada): lo malo es cosa de los de fuera, nosotros somos un remanso de paz, la isla de la calma, enturbiada por todos los que vienen a perturbarnos y a contaminarnos. Podría haber sucedido que el asesino y la asesinada fueran foráneos, y así las conciencias estarían tranquilas. Pero no, eran ben mallorquins, nacidos en esa misma localidad. Con lo que resulta que sí que había algún violento. 

La otra reacción vino de una consellera del nuevo govern, que también manifestaba su estupor por el hecho de que alguien "nacido en democracia y educado en los valores democráticos" pudiera hacer eso. Como si la educación (el paso por un colegio) bastara, como si la democracia fuera una panacea que con sólo invocarla resolviera todos los males del mundo. Y como si los gobiernos fueran capaces con una ley y un par de reformas de alterar dinámicas de siglos (o milenios).