martes, 11 de mayo de 2010

Dosificando la amistad

Todos tenemos gente, que aunque nos caigan bien y les apreciemos, es conveniente que frecuentemos en pequeñas dosis, por el bien de la recíproca amistad.

2 comentarios:

PENSADORA dijo...

¡que razón tienes! además, esto suele ocurrir precisamente con quienes tienes más confianza y por lo tanto más posibilidad de discusión...

En fin.

El Pez Martillo dijo...

Si hay una buena amistad, la posibilidad de discusión se reduce, o al menos no es un problema para esa amistad. Mi entrada iba más bien por otro lado: por esa gente que agota, y que no conviene frecuentar demasiado, por muy bien que nos caigan.

Un saludito.