martes, 8 de septiembre de 2009

Con la ciencia en la mano (y la superstición y el miedo en la otra)


La exagerada cobertura mediática que se le está dando al asunto de la Gripe A (el enésimo apocalipsis que servidor vive, tras el efecto 2000, el ántrax terrorista, la gripe aviar...), está poniendo sobre la mesa el poder de los medios, capaces de aterrorizar a todo el mundo con amenazas fantasma. La verdadera desgracia es que no hay nadie capaz de aportar algo de sensatez a todo esto. Los que pueden hacerlo, los médicos e investigadores, se muestran titubeantes y temerosos, porque todo lo que digan se va a ver amplificado y distorsionado por la prensa, que pondrá en un rincón los llamamientos a la calma y los resultados de las investigaciones para destacar con grandes titulares cada nueva muerte que se produzca.

Porque sí, parece una enfermedad bastante leve (pero muy contagiosa, es cierto), y en el petit comité hospitalario es motivo de befa, cachondeíto y críticas a la prensa. Pero se sigue el baile al son de los titulares, porque se montan y se airean protocolos draconianos y, llegado el caso, se tiene que vestir uno como un astronauta, mostrando una esquizofrenia y una escasez de criterio alucinantes. Porque aquí nadie sabe ya pararle los pies al amarillismo, ni siquiera los que se supone que saben de esto pueden plantar cara, y agachan la cabeza, dejándose llevar por una marea que saben más bien inofensiva. Debilidad, o que en el fondo no se fían de sí mismos (una postura muy sensata y bastante inédita en el mundo médico) y ponen velas a Dios y al Diablo, con rigor de la ciencia pero dejándose llevar por el temor.

Lo triste de todo esto es que hay enfermedades más peligrosas, con mayores tasas de mortalidad, ante las que no se toman medidas tan extremas, y en los hospitales se tratan más relajadamente que esta gripe. Eso, y que todo esto ya me lo contaban de pequeño con el cuento aquél de "que viene el lobo, que viene el lobo". El día que venga de verdad lo vamos a flipar. ¿Nos "informará" entonces la prensa con tanto detalle como ahora? Llámenme pesimista, pero sospecho que el día que el mundo se acabe ni nos enteraremos, ni nadie nos habrá avisado. Tal vez sea mejor así.

2 comentarios:

Musa dijo...

Amigo Pez, ya estaba usted tardando en poner algún comentario acerca de la gripe A. Aunque no tengo muy claro si es sobre el citado virus o lo que está haciendo en realidad es meterse por enésima vez con la prensa. En cualquier caso no me lo había planteado así, eso de que los médicos y análogos se muevan, como dice usted, al son de la prensa... La verdad el mundo de los medios es como es, pero coincido en que no todo el mundo debería actuar en función de él.

Un saludo desde aquí cerquita.

El Pez Martillo dijo...

En realidad, con quien me estaba metiendo es con el mundo sanitario, que le están siguiendo el juego a todo el tinglado mediático.

Saludos.