martes, 1 de abril de 2008

El remake del remake


No entiendo esta manía que les ha entrado a los de Hollywood en los últimos años de hacer remakes de clásicos del cine. Igualmente vale para las versiones que hacen de otras películas (en especial de las de terror japonés). Da la impresión de que se ven obligados a, para mantener el negocio, sacar al año una serie de películas, y que cubren el expediente copiando lo suq eotros han hecho. Eso sí, luego te lo venden como la última gran revolución y como si fuera un perfeccionamiento de la cosa. Le ponen algún efecto especial o se inventan un nuevo final, da igual, lo importante es sacar algún dinerito. Y, como es de esperar, las versiones no suelen ser gran cosa.

Detrás de esto, además de la necesidad de sacar películas al mercado de forma compulsiva para mantener la industria, se esconde una cierta idea de progreso, según la cual, algunas películas se pueden hacer mejor ahora que cuando se huicieron. Pero se les olvida que una película no son sólo medios técnicos (efectos especiales y tal) sino que la forma de narrar la historia, los diálogos, la fotografía... tienen muchas veces que ver con el sello que el director y la época les imprimen. A algunas películas, sobretodo a los clásicos (que son las más susceptibles de ser revisadas), les queda un aura especial. Y eso se pierde en las reelaboraciones, que, menos mal, acaban siendo olvidadas e incluso denigradas. Otras veces, en cambio, antiguas películas menores son tomadas por directores con cierto renombre, y de este modo las rescatan de ese mismo olvido, pero esto ocurre en muy pocas ocasiones.

Siempre han habido remakes, pero últimamente hay muchos, y no me gustan.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Coincido plenamente con usted amigo pez... Anque hay que reconocer que gracias a los remakes las nuevas generaciones pueden o podemos conocer algunos clásicos imprescindibles... Y aunque el remake en si no valga la pena, siempre se puede ir a buscar el original...

El Pez Martillo dijo...

Pues sí, es cierto, pero muchas veces la gente se queda con la copia. Supongo que porque les parecerá más actualizada (aunque eso no importa, ya que la historia es la misma). Otra cosa muy distinta es hacer tramas colaterales, eso sería mucho más original, aunque no dejaría de ser un beber en otras fuentes. Por ejemplo, alguien podría escribir una historia con el Sam de Casablanca como protagonista.