jueves, 10 de abril de 2008

Astenia primaveralis


Hace unos días que casi todo el mundo con quien hablo se queja de lo mal que se encuentran. Que si la cabeza, que si la tripa, en fin, que todo el mundo anda un pelín tocado. Debe ser la primavera, que hace sus estragos. O eso o que hay algo a punto de ocurrir (como si notáramos algo en el ambiente).

La cuestión es que empieza a hacer más calorcillo, que por las noches las sábanas y mantas ya estorban un poco, los abrigos se van reservando para las horas de la noche, el sudor aflora con más facilidad... En fin, que el invierno va dejando paso al verano poco a poco. Y eso, cuando ocurre de forma brusca (hace un par de semanas estábamos instalados en el frío), se acusa. Y este año parece que se eestá acusando bastante. Yo también lo noto. Mis múltiples sufrimientos físicos se agudizan, el malhumor aparece y la inspiración se va a tomar viento (se nota, ¿no?).

Que el verano pase pronto...

8 comentarios:

Jarttita. dijo...

Pues mire, hoy estoy con usted:).

El Pez Martillo dijo...

Mo decepcionaría que sólo fura hoy que está usted conmigo.

Jarttita. dijo...

:).

Stones dijo...

Pero puede haber alguien que desee que se pase el verano?? Yo me paso todo el otoño y todo el invierno deseando que empiecen los rayos del sol a calentar... (no sabe usted lo duros que pueden llegar a ser los inviernos en la meseta o si, lo digo por sus genes castellanos)

Johannes A. von Horrach dijo...

Yo me apunto a la primera tesis, la de que va a pasar algo... sobrenatural. Creo que tiene que ver con las obras de reparación del metro de Palma, más eternas que la construcción de la Muralla China. Tal vez han encontrado algo allí (un monolito por ejemplo, o un pasillo a simas infernales, o a Elvis Presley tomándose un cubata) que va a cambiar nuestro mundo, ajajajajaj.

El Pez Martillo dijo...

Hombre, Horrach, lo del metro en sí mismo ya roza lo sobrenatural. Seguro que lo reabren cuando acabe el curso. Y para el próximo curso se volverá a estropear...

Stones, yo soy uno de los que el verano no le gusta. Más que el verano es el calor lo que no me gusta (este calor húmedo de la isla es insufrible). Mi época preferida es el otoño, en él me siento en mi salsa. En verano intento quedarme en casa lo máximo posible, en pelotas y a la sombra del ventilador.

Saludos a todos.

Anónimo dijo...

Ya en el refranero español se dice que "la primavera, la sangre altera". Pues es muy normal que nos alteremos en cierta manera. A unos les sienta bien y a otros les sienta regular, pero en mi caso la primavera me revive completamente, me hace sentir contenta y feliz, los días son más largos, el paisaje se hace más agradable, podemos disfrutar de algún paseito, los cafés o lo que se tercie en las terracitas, etc., etc. Para mí la primavera es la mejor época del año... si tuviera alguna alergia primaveral, no sé yo si diría lo mismo.

A pesar de ser bastante nocturna, me estoy reformando, y esto comienza con aceptar alegremente el comienzo de la primavera y la llegada del buen tiempo.

Muchos besitos, querido pez martillo. Y no me hables del calor del verano, que ya lo he sufrido yo con yeso y todo!

El Pez Martillo dijo...

Hola, Femme fatale, guapísima, gracias por molestarte en escribir unas líneas en mi espacio.

Sí, la primavera la sangre altera, pero lo puede hacer de muchas formas. Y a mi este año no me está sentando demasiado bien. Pero bueno, tengo intención de sobrevivir.

El calorcillo que empieza a hacer todavía es llevadero, y se podría quedar así todo el verano. Lo malo que tiene, y que no me gusta nada, es que es la avanzadilla de ese calor pesado, húmedo y pegajoso del verano isleño, que, para mi, es insoportable.

Un besazo.