martes, 6 de febrero de 2007

Las primeras mujeres


Si nos preguntan cuál fue la primera mujer, casi todos responderíamos que fue Eva. Pero resulta que antes de Eva hubo dos primeras mujeres más.

Cuando Yahvé creó el mundo y a Adán, encargó a éste que diera nombre a todos los animales. Por parejas iban desfilando ante él, y él les ponía un nombre. Adán observó que todas las parejas estaban formadas por macho y hembra, y sintió celos de su amor. Intentó copular con las hembras, pero ninguna la satisfizo. Entonces le pidió a Yahvé que le diera un hembra adecuada que pudiera satisfacerle y a la que amar. Yahvé escuchó sus ruegos y creó una mujer, utilizando el mismo método que había usado para hacer a Adán (a partir del barro, y algunas fuentes hablan también de excrementos). Esta mujer fue Lilith. Tradicionalmente se la ha representado como una mujer bellísima, de larga melena rizada y pelirroja.

Lilith siempre fue recelosa de un Adán que intentaba dominarla, y que, a la hora del sexo, pretendía siempre ponerse encima. Ella le replicaba que Dios los había hecho iguales, y que era injusto que ella siempre tuviera que estar debajo. Como Adán insistía y la obligaba, Lilith pronunció el nombre secreto de Dios y salió volando del Edén, huyendo a orillas del Mar Rojo, tierra de demonios. Allí se entregó a la lujuria con esos demonios, dando a luz numerosas criaturas hijas suyas, los lilim. Yahvé mandó tres ángeles para convencerla y devolverla al Edén, pero ella se negó, lo cual encolerizó a Yahvé, que prometió que mataría todos los días a cien de sus hijos. Lilith, que ya había demostrado su carácter, le respondió que, a cambio, ella y los demonios mataría a un número similar de hijos de Adán.

Mientras todo esto ocurría, Adán se había quedado solo en el Edén , y Yahvé decidió hacerle otra mujer. El método escogido esta vez fue bastante repulsivo para Adán. Le formó a esa mujer delante de él, haciéndola de dentro afuera, es decir, primero los huesos, luego las vísceras, vasos sanguíneos, músculos y piel. La visión de las interioridades del cuerpo femenino horrorizó a Dán, que la rechazó de plano desde el primer momento. No nos ha llegado el nombre de esta segunda mujer.

Al final, Yahvé decidió dormir (anestesiar) a Adán y crear una tercera mujer a partir de una de sus costillas. A la tercera fue la vencida, y Eva entró en escena, pasando a ser la primera mujer efectiva. La historia de Eva es más que conocida: la manzana, la serpiente, el pecado original... Pero hay algunas versiones de la historia que afirman que no fue una serpiente la que tentó a Eva, sino que fue Lilith, que celosa y rabiosa intentaba sabotear toda la vida de la nueva humanidad (en la capilla sixtina la serpiente tiene torso de mujer).

8 comentarios:

Cvalda dijo...

Asi que Adan era zoofilo, egoísta y machista...Lilith hizo bien en irse, jajaja.

No concoía la historia, pero es muy interesante, la verdad :)

Johannes A. von Horrach dijo...

¡Se me ha adelantado usted, amigo Pez! Llevo un tiempo dándole vueltas a una entrada sobre Lilith, titulada 'La Primera Ctónica'. Es muy jugosa esta historia, que no aparece en la Biblia, pero sí en fuentes talmúdicas y que ha sido recuperada recientemente.

Por cierto, sigue usted publicando sus entradas a un ritmo envidiable. A este paso se convertirá en el Asimov de la blogosfera :-)

Saludos.

El Pez Martillo dijo...

Horrach, no se preocupe si me he adelantado. Sólo he contado muy por encima la historia. Le dejo a usted los pormenores ctónicos profundos (sé que le gusta eso).

Sobre lo de mi compulsión a la hora de publicar entradas, es una imposición que me he hecho. Como soy más bien vago, me obligo a escribir algo (casi) todos los días. Me conozco y sé que si no lo hiciera de cada vez escribiría menos. La pega que tiene es que dejo poco margen para el debate. Y también que se me cuelan bastantes hijos deformes e inviabloes de mi imaginación (hoy estoy poético).

Cvalda: y porque aún no había niños, porque si no hubiera sido pedófilo e incestuoso (ningún cura me supo aclarar cómo de dos personas pudo surgir toda una especie sin necesitar el incesto, así de tarados hemos salido todos).
Más que machista, Adán era egoísta (cómo él era el único, no podía estar defendiendo al "macho"). Y además era tonto, con lo que molan las posturitas...

Placiplóstilus dijo...

Si dios (existiera y) fuera mujer no pasarían estas cosas.

Una anecdota: La teclista del grupo Lujuria se llama Lilith, y esta historia la conocí de una canción suya, Lilith, del disco "Enemigos de la castidad"

Un saludo

Cvalda dijo...

Jajaja, te doy toda la razón ;)

Johannes A. von Horrach dijo...

¿Que qué pasaría si Dios fuera mujer? Pues yo siempre he pensado que era mujer (muy mujer, además, muy ctónica), precisamente por eso nos pasa lo que nos pasa. ¿O no ven que se pasa el día en la peluquería y no atiende a nuestras súplicas?

El Pez Martillo dijo...

Que Horrach, más versado en asuntos hebreos que servidor, nos ilumine:

¿De dónde me he sacado yo que en versiones antiguas de la Biblia se habla de Dios como "ella"? ¿Es cierto, o es algo de las pseudofeministas y del rollo new age?

Johannes A. von Horrach dijo...

Debería consultar con mi rabino de guardia (no el satánico, sino el de Mechanicsburg, el amigo Jordi), pero a bote pronto creo que se trata de un rollo antifalocéntrico. Lo que sí se da en la Biblia (más concretamente en el Pentateuco) son dos maneras distintas de referirse y, por tanto, de entender, a Dios: como Yahveh y como Elohim (de ahí que se identifiquen dos versiones, la yahvista y la elohista), siendo el primero de ellos más personal e 'individuado' que el otro. Curiosamente el Jesús de los Evangelios se refiere en la cruz a Dios (además de como 'Abbá', 'padre') como Elohim, y no como Yahveh ('Eli, lama sabactani', 'Dios mío, ¿por qué me has abandonado?').

Shalom!